Paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda. A mas y a más, pero y empero, aqueste este cura ignaro raro cleuasmo asno, inscríbese en lo del pintor greco antiguo, Apeles: ¡Zapatero a sus zapatos! A mas y a más, pero y empero, aqueste este cura ignaro raro cleuasmo asno, ha de jugar en un sube y baja de algún parque párvulo infantil del mundo con el hexámetro de Quintiliano. A mas y a más, pero y empero, aqueste este cura ignaro raro cleuasmo asno, no ha de correr la maravillosa suerte anancástica de Jorge Luis Borges, que hacía leer a su ayudante diligente inteligente secretaria mas de cien veces sus escritos para ir a la publicación. Agora ahora hogaño, cuenta la historia que el imperio romano, lograra una paradójica paz de 206 años. Una paz de entre el año 27 antes de Cristo y 180 años después de Cristo. Paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda, que iniciárase con el mandato de Octavio César. Octavio César, el fundador del Imperio romano y primer emperador romano. Gobernara desde el año 27 a. C. hasta su muerte en el año 14 después de Cristo. Y, con el reino de Augusto diose inicio a una era asociada con la paz imperial, la paz octaviana. En la que el mundo romano estuvo libre en gran medida de conflictos armados aparte de guerras de expansión y el año de los cuatro emperadores. Agora ahora hogaño, el imperio romano lograra una paz de 206 años. Se ha de seguir que hubo, bastantes nalgas y un radiante ojo avizor culantro quevedoiano de entre gracias y desgracias del ojo del culo de Don Francisco, para lograr la paradójica plausible prudente irónica paz octaviana absurda medular estable profunda de entre nalgas de Don Francisco. Las nalgas de Don Francisco, tal y como si fueran la guerra y la paz. Se ha de seguir que en lo afirmativo, el imperio romano octaviano lograra una paz medular estable profunda. Se ha de tener que de entre el imperio capitalista histórico histérico rapaz y el materialismo histórico flemático capaz, también ha de existir la paradójica plausible prudente irónica paz octaviana absurda medular estable profunda de entre las nalgas de Don Francisco. Y, se ha de tener que el imperio norteamericano, no ha de estar por encima del imperio romano. O sea y es decir, decir que la paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda de entre la guerra y la paz, es tangible tocable palpable, incluso e inclusive, de entre los años 27 antes de Cristo y 180 años después de Cristo hubo la existente existencial esencial paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda por 206 años. O sea y es decir, decir 206 años de entre nalgas quevedoianas absurdas. De entre nalgas se pueden lograr muchas cosas con muchas ganas y con muchas cartas diplomáticas diabéticas de Don Francisco, de Don Tiburcio y de Don Quijote. A saber, Moscú y los llanos de Ucrania, en Nathalie de Los Hermanos Arriagada. De entre nalgas, se trastrocan, el tiempo y la persona, el hecho y el lugar. Al tiempo en que Octavio César, engastara con Don Francisco. El equilibrio dinámico dialéctico difuso dialógico diplomático diabético, ha de ser necesario y suficiente, en la tesis TINACO de Maleo 2001 de entre la guerra y la paz, de entre gracias y desgracias. O sea y es decir, decir la paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda y el radiante ojo avizor culantro quevedoiano absurdo medular estable profundo. O sea y es decir, decir el radiante ojo avizor culantro quevedoiano absurdo medular estable profundo, el ojo del culo, de entre nalgas y de entre las gracia s y las desgracias de Don Francisco. O sea y es decir, decir de entre la guerra y la paz, ha de estar siempre y siempre el equilibrio dinámico dialéctico difuso diplomático diabético, la perogrullada primera vez de Perogrullo, en que, mas y más, pero y empero, el zumbido de las familiares golosas moscas vulgares se han cazar con miel que con vinagre como asina se veía en las enrolladas serpentinas melifluos que guindaban del techo de la surtida pulpería Don Tiburcio de la calle Alegría de San Carlos de Cojedes. O sea y es decir, decir que en el límite límbico grembo fronterizo, en que no se ha de amargar la golosina, ha de estar la diluida existente existencial esencial seglar paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda. 62744
Con digresión y sin digresión, la paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda. La paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda, ha de reclamarse siempre en las contiendas. La paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda, apersogada al radiante ojo avizor culantro quevedoiano absurdo medular estable profundo en que los tiempos y las personas se conjugan alrededor entorno contorno al producto final y fruto terminal, que no del exterminio del sionismo israelí de Benjamín Netanyahu en la franja de Gaza y del pueblo de Palestina. La paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda, sino destino camino comino comido de la paz duradera mundial por los llanos de Ucrania y de la tumba histórica de Lenín, de los llanos de Ucrania y del chocolate del Café Pushkin con Nathalie de Los Hermanos Arriagada. Y, todo nos ha de llevar a las nalgas en las mesas misas musas de Don Francisco, a las serpentinas golosinas de Don Tiburcio y a la paradójica ironía ofensiva defensiva quijotesca cervantina absurda medular estable profunda de entre la locura y la cordura de Don Quijote. Con Don Quijote, con Don Tiburcio y con Don Francisco, el mundo ha de estar tranquilo por las nalgas de los siglos y de los siglos, amén, tanto como en la diluida existente existencial esencial seglar paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda.
Con divagancia y sin divagancia, la paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda. Ha de ser de equilibrio, tanto como de entre las nalgas de Don Francisco, tanto como en la cola de las aves, del equilibrio y de la estabilidad en el vuelo y el caminar de los pájaros. Con la excepción del albatros, príncipe del nublado de entre el suelo y el cielo, que en el suelo, que de entre ataques y mofa, que desterrado, sus alas de gigante le impiden caminar. Tanto como la belleza de la golondrina en el ordenamiento de sus organismo para el vuelo, una proporción de entre el medio y el fin, de entre el método y el resultado, la paradójica proporcional verdad verdadera veraz verídica socrática absurda medular estable profunda de entre la verdad y la mentira, lo verdadero y lo falso, de entre el sí y el no de Sócrates en el gigantesco cartón cuadrángulo rectángulo pitagórico que guindara del techo del botiquín de Miguelito de San Carlos de Cojedes. Y, de los pájaros y de las aves de Charles Baudelaire, de José Antonio Ramos Sucre y Maleo 2001, la paradójica gris sombría penumbra paraulata llanera cantarina cojedeña de Cojedes, que antes de Laozi y antes de Walt Whitman y el lienzo pictórico blanquinegro del yin y el yang con su grisura sombría penumbra, la paraulata llanera cojedeña, ya cantara de entre nube con agua y nube sin agua, la nube sin agua es como un río clarito y la nube con agua es como un río turbulento y oscuro. O sea y es decir, el paradójico metafórico quiasmo río heraclitoiano medular estable profundo de entre el descender y el no descender, de entre somos y no somos de Heráclito en que un río no es dos veces el mismo río y es el mismo río las dos veces. Decir que el lienzo pictórico del yin y el yang, pintara a la paraulata cojedeña de entre nubes. Y, de entre nubes ha de haber siempre una primera vez, o sea y es decir, decir la perogrullada primera vez de Perogrullo, el equilibrio, el límite límbico grembo fronterizo, ha de haber el equilibrio, hasta que se derrama la nube con agua. El equilibrio, es la condición necesaria y suficiente de los casos correlativos concomitantes contradictorios caliginosos de la tesis TINACO de Maleo 2001, por lo que se tiene dicho y por lo que deténtase mentado, decir nube con agua y nube sin agua, es tanto como decir y mentar la guerra y la paz. Y, de entre la guerra y la paz, la paradójica gris sombría penumbra paraulata llanera cantarina cojedeña de Cojedes medular estable profunda, que es tanto como decir, de entre nubes, la paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda.
Con concordancia y sin concordancia, la paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda. El equilibrio, que ha de ser la condición necesaria y suficiente de los casos correlativos concomitantes contradictorios caliginosos de la tesis TINACO de Maleo 2001. Presente en el díptico del Libertador Simón Bolívar. En el díptico natura y persona, a que redujera el hijo prodigio de Caracas, al hexámetro de Quintiliano, o se y es decir, decir la reducción de tiempo y persona, hecho y lugar, el medio-manera-motivo y la finalidad, en que el único testimonio de la reducción del hexámetro de Quintiliano a díptico, fuera el lomo de Palomo. Agora ahora hogaño, de entre natura y persona, díptico del Libertador, a mas y a más, del impulso irresistible inspirativo instantáneo bolivariano absurdo medula estable profundo de entre natura y persona del hijo de Caracas, ha de estar el equilibrio ecológico ambiental, que lo hubo en la perogrullada primera vez de Perogrullo, hasta que llegara el imperio capitalista histórico histérico rapaz, y, acabara con el equilibrio de entre natura y persona, destruyera y acabara con equilibrio ecológico ambiental. Y, manifiesto el desequilibrio de entre natura y persona, en el fenómeno del calentamiento global y del cambio climático y la aparición del fenómeno de El Niño y el fenómeno de La niña, de las inundaciones y las sequías en todo el mundo. Al imperio capitalista histórico histérico rapaz, jamás de los jamases le pasara por su loca cabeza del lucro móvil de la riqueza, lo del imperio romano con su Derecho Usual Ordinario lo del equilibrio de la paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda.
Con rebozo y sin rebozo, la paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda. Es tanto como nombrar y decir lo de Georges Lemaitre y su paradójico contradictorio caliginoso bigbang lematreiano absurdo medular estable profundo de Georges Lemaitre de entre el universo expansivo einsteiniano de Albert Einstein 1919 itido por la NASA y el universo contractivo maleoiano de Maleo 2001 no itido por la NASA. Y, al paradójico contradictorio caliginoso bigbang lematreiano absurdo medular estable profundo de Georges Lemaitre, el imperio capitalista del capitalismo histórico histérico rapaz, aun y aún, no ha conquistado no lo ha exterminado, porque aun y aún, no ha conquistado el espacio sideral para acabar con el paradójico contradictorio caliginoso bigbang lematreiano de Georges Lemaitre. Pues a decir verdad el capitalismo histórico histérico rapaz, acabara y borrara de la faz de la Tierra a Octavio César y a su paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda.
Si la paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda existiera por 206 años de entre la guerra y la paz. Entonces sea dicho que decir la paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda es tanto como decir el límite límbico grembo fronterizo, el equilibrio dinámico dialéctico difuso dialógico diplomático diabético, la perogrullada primera vez de Perogrullo de la tesis inédita novedosa avanzada cascaramarga cojedeña de Cojedes TINACO de Maleo 2001. Bergoglio ergo vergo sea dicho que decir la perogrullada primera vez de Perogrullo, es decir el equilibrio dinámico dialéctico difuso dialógico diplomático diabético. Que la perogrullada primera vez de Perogrullo, es la condición necesaria y suficiente de los casos correlativos concomitantes contradictorios caliginosos de la tesis TINACO de Maleo 2001. Que la perogrullada primera vez de Perogrullo, es tanto como decir y nombrar al necesario forzoso plausible prudente paradójico medio quintilianoiano bolivariano tercio medio un medio aristotélico absurdo medular estable profundo de entre el exceso y el defecto de La Moral de Aristóteles. Que decir el paradójico contradictorio caliginoso bigbang lematreiano absurdo medular estable profundo de Georges Lemaitre de entre el universo expansivo einsteiniano de Albert Einstein 1919 itido por la NASA y el universo contractivo maleoiano de Maleo 2001 no itido por la NASA, es tanto como decir y nombrar de entre la guerra y la paz a la paradójica paz octaviana absurda medular estable profunda.