El catastrofismo climático que llevan años intentando imponer desde Bruselas para fomentar políticas globalistas con ejemplos como el deshielo en la Antártida está empezando a ser desmontado por datos científicos recientes que contradicen el discurso dominante. 5u25k
Una nueva investigación liderada por la Universidad Tongji, en China, ha documentado un notable incremento en la masa de hielo en zonas del este antártico entre 2021 y 2023, rompiendo con la narrativa de retroceso constante del hielo polar.
Utilizando información proporcionada por los satélites GRACE y GRACE-FO de la NASA, los expertos han identificado un aumento medio de 108 giga toneladas de hielo por año en las regiones de Wilkes Land y Queen Mary Land, áreas donde previamente se había reportado una pérdida media de 142 giga toneladas anuales durante la década anterior.
Este cambio ha dejado desconcertada a parte de la comunidad científica, que ahora debe reconsiderar algunas de las hipótesis mantenidas hasta el momento sobre el comportamiento climático en el continente helado.
El estudio, publicado en la revista Science China Earth Sciences, señala que glaciares como Totten, Denman y Moscú —históricamente en retirada— han experimentado un repunte en la acumulación de masa, gracias principalmente a un aumento excepcional de las precipitaciones en la zona.
Estas nevadas extraordinarias, asociadas a una mayor humedad atmosférica, habrían contribuido decisivamente a este fenómeno.
Este giro inesperado recuerda que la atmósfera y los procesos climáticos de nuestro planeta son mucho más dinámicos y menos previsibles de lo que se suele plantear en ciertos foros políticos y mediáticos.
Si bien se han detectado incrementos de hielo en zonas específicas del este antártico, en otras como la Antártida Occidental las pérdidas siguen siendo preocupantes, lo que refuerza la necesidad de análisis detallados y lejos de simplificaciones.
Para los investigadores, este hallazgo es una muestra más de que no se pueden extraer conclusiones definitivas a partir de observaciones puntuales.
Insisten en la importancia de seguir recopilando datos a largo plazo para evaluar de forma rigurosa la evolución del clima, sin caer en alarmismos prematuros ni en narrativas absolutistas.
Es tan sorprendente El Cambio que preocupa a los expertos. Autor,Georgina Rannard, Becky Dale y Erwan Rivault
El hielo marino que rodea la Antártida está muy por debajo de cualquier nivel invernal registrado anteriormente, según muestran datos satelitales, un nuevo punto de referencia preocupante para una región que alguna vez pareció resistir al calentamiento global.
"Está tan lejos de todo lo que hemos visto que es casi alucinante", dice Walter Meier, que monitorea el hielo marino en el Centro Nacional de Datos sobre Hielo y Nieve de Estados Unidos.
Una Antártida inestable podría tener consecuencias de gran alcance, advierten los expertos.
La enorme extensión de hielo de la Antártida regula la temperatura del planeta, ya que la superficie blanca refleja la energía del Sol de regreso a la atmósfera y también enfría el agua debajo y cerca de ella.
NO SE DEBE SER DËBIL; SI SE QUIERE SER LIBRE