El 4 de junio de 1830, el Mariscal Antonio José de Sucre fue asesinado en las montañas de Berruecos, a 80 kilómetros de Pasto. A sus 35 años, el héroe de la independencia cayó víctima de una emboscada planeada no por fuerzas realistas, sino por grupos disidentes con intereses secesionistas. 5k2152
La población de Berruecos es la cabecera municipal de Arboleda. Ese pueblito acogedor está situado al norte de Nariño. La distancia de Pasto a Berruecos es de 73 kilómetros. Por ese camino el primer viernes de junio de 1830 cuando apenas contaba con 35 años de edad es asesinado el Mariscal Sucre.
Tranquilo y seguro iba Sucre al ritmo de libertadores cuando junto al revoloteo de los pájaros, se escucharon cuatro disparos de fuego cruzado en el sitio escogido para la infamia conocido como La Jacoba.
Testigos dicen que antes del ataque, desde la profundidad de la montaña se escuchó el grito: "¡General Sucre!". Poco después, en su último galope, el militar cayó al suelo arrastrado por su caballo, alcanzado por balas que le rozaron la cabeza y lo hirieron en la nariz y la oreja. Otro proyectil perforó su pecho y le destrozó el corazón, causándole la muerte de forma fulminante.
Los autores materiales del crimen fueron José Erazo y tres peones del ejército: Andrés Rodríguez, Juan Cuzco y Juan Gregoria Rodríguez, bajo la dirección de Apolinar Morillo. Según el General Tomás Cipriano Mosquera, la orden de asesinar a Sucre provino del Clan "septembrista" de Bogotá, el mismo grupo que intentó acabar con la vida de Bolívar en 1828.
Consideraban a Sucre un obstáculo para sus planes, pues su liderazgo mantenía la unidad de Colombia. La noticia corrió rápidamente por toda América, dejando un vacío irreparable en la historia de la independencia latinoamericana.
Bolívar sentía una especial iración por Sucre. "Si usted quiere venir a ponerse a la cabeza del Ejército, yo me iré atrás, y usted marchará adelante para que todo el mundo vea que el destino que he dado a usted no lo desprecio para mí. Esta es mi respuesta. Soy de corazón". Bolívar a Sucre. Huamanga, Perú. 1824.
