A fin de considerar las causas estructurales internas en la dinámica del sistema capitalista que puedan llevar a su final como sistema económico y socio político concluyendo una etapa en la evolución de la sociedad humana, tomamos como el elemento esencial en el marxismo, la teoría de la tendencia decreciente de la tasa de ganancia de Karl Marx la cual la propuso para explicar las recurrentes crisis y, en última instancia, el final del capitalismo. Igualmente consideramos este análisis desde la perspectiva de la tendencia al caos entendiéndolo como un fenómeno, inherente a los sistemas y no solo a las organizaciones, sino a cualquier entidad y por lo tanto aplicable al sistema capitalista. 4a635z
Así cualquier estructura organizativa, independientemente de su tamaño o propósito, está sujeta a dinámicas de entropía o capacidad para realizar trabajo, de organización, que pueden conducir a la ineficiencia, el conflicto y, en algunos casos, la desintegración. Este proceso también ocurre en los sistemas sociales, por lo que lo integramos en este análisis.
En los sistemas sociales están presentes en cualquier momento de su existencia, como diría Ilya Prigogine, dos elementos dialecticos, un elemento creador de desorden y también un elemento creador de orden, y los dos están siempre ligados.
Y argumentamos en este sentido que la teoría de Marx ofrece una explicación del caos inherente al sistema capitalista y cómo este podría llevar a su autodestrucción, producto de su propia dinámica inevitable como es el origen de la tendencia decreciente de la tasa de ganancia.
Esta tendencia decreciente de la Tasa de Ganancia, Marx la sustentó en que el capitalismo, por su propia naturaleza, se basa en la acumulación de capital. Las empresas compiten entre sí para obtener ganancias, y para hacerlo, buscan constantemente formas de aumentar la productividad y reducir los costos. Para lograrlo las empresas invierten en tecnología y maquinaria (capital constante), lo que reemplaza a los trabajadores (capital variable). Esto lleva a un aumento en la "composición orgánica del capital" (la proporción de capital constante en relación con el capital variable).
Marx postuló que, a medida que aumenta la composición orgánica del capital, la tasa de ganancia tiende a disminuir. Esto se debe a que el capital variable (la fuerza de trabajo, que genera la plusvalía, la fuente de la ganancia capitalista se vuelve relativamente menor en comparación con el capital constante (maquinaria, tecnología).
En otras palabras, la inversión en capital constante no genera el mismo nivel de ganancia que la inversión en capital variable.
Con la caída de la tasa de ganancia se desencadenan crisis económicas. Las empresas pueden responder a la disminución de las ganancias de varias maneras, como aumento de la explotación, aumentando las horas de trabajo, reduciendo los salarios, etc. Esto puede llevar a conflictos sociales y laborales. Buscando nuevos mercados y expandiendo el alcance del capitalismo a áreas donde la composición orgánica del capital es menor y la explotación es mayor (ej. países en desarrollo, China). Especulación financiera, que permite desviar capital a inversiones financieras especulativas (ej. mercados de valores, bienes raíces). Esto crea burbujas y, eventualmente, colapsos financieros.
O la clásica concentración del capital, donde las empresas más fuertes sobreviven a las crisis y absorben o eliminan a las más pequeñas, lo que conduce a una mayor concentración del capital en menos manos.
Pero la teoría marxista señala que estas medidas crean su propio caos interno debido a estas dinámicas todas ellas llevan a la concentración de capital en manos de la burguesía y las grandes masas de la población son excluidas, la riqueza no se socializa, se incrementa la desigualdad social, por la concentración del capital y la explotación de la clase trabajadora conducen a generar conflictos sociales. Así las crisis económicas y la desigualdad desestabilizan las estructuras políticas y sociales, trayendo inestabilidad política, revueltas y revoluciones.
La competencia se hace más irracional, ya que las empresas compiten despiadadamente, lo que conduce a la destrucción creativa, la sobreproducción y la subutilización de recursos.
Todo lleva al "Final Caótico" del Capitalismo. Marx predijo que estas contradicciones internas del capitalismo, impulsadas por la tendencia decreciente de la tasa de ganancia y otras dinámicas, eventualmente llevarían a su colapso.
El final caótico podría manifestarse de varias maneras, como revoluciones, crisis permanentes,
Guerras y Conflictos globales, como en Gaza, Ucrania, Haití, Yemen, Venezuela, colapso ambiental, todo ello generado por la búsqueda desenfrenada de ganancias para intentar revertir la tendencia decreciente de la tasa de ganancia.
Así que consideramos que esta teoría de la tendencia decreciente de la tasa de ganancia de Marx conjuntamente con la teoría de la entropía, explica cómo el sistema capitalista, impulsado por su propia lógica interna, genera su propio caos, de los entes y las organizaciones.
Queremos resaltar así la importancia de la teoría marxista en su complejidad y en su carácter científico, que aporta una visión lógica, histórica, científica, dialéctica y un marco general para interpretar integrándose a otras explicaciones científicas, con más exactitud las situaciones críticas por las cuales está atravesando ahora la humanidad entera.