Viernes, 06 de junio de 2025.- Daniel Baeza analiza el papel creciente de China en la economía global y su influencia estratégica en el sistema financiero. Se plantea que China, aunque desde Occidente aún no se le preste la suficiente atención, ya compite de tú a tú con Estados Unidos en una guerra de capitales. A través de la acumulación de oro y una estrategia sutil de devaluación del yuan —sin recurrir al dólar—, China busca licuar su deuda interna. Esta maniobra no pretende atacar al dólar directamente, sino fortalecer su economía sin desestabilizar su sistema ni generar tensiones con Estados Unidos.
Por otro lado, se desmonta la idea de que China desee que el yuan se convierta en la moneda de reserva mundial. El país no está dispuesto a asumir las responsabilidades que ello implica, como los déficits fiscales estructurales. En lugar de eso, China prefiere que su moneda gane protagonismo en el comercio internacional. Sin embargo, la falta de un mercado financiero líquido y accesible limita esa ambición. Así, se concluye que más que una sustitución del dólar, lo que podría emerger es un acuerdo inevitable entre Estados Unidos y China para equilibrar sus poderes económicos.