En los corazones que laten en la jurisdicción cada Consejo Comunal, cada Comuna, Ciudad comunal o por ahora en un Circuito electoral, más allá del trajín cotidiano, reside un potencial transformador que el Presidente Nicolas Maduro ha reconocido, promueve y proyecta sin duda alguna. En este potencial socio-comunal. El Presidente como líder, esta haciendo la apuesta de esta nueva fase de la revolución bolivariana: se trata del estimulo sostenido que aviva el ESPÍRITU de la COMUNALIDAD, del COMUNALISMO, como antídoto eficaz, ante la amenaza del neofascimo, del autoritarismo que se cierne sobre la Nación, de esa enfermedad que esta allí detrás como una sombra producto del individualismo, la tribalización y la soledad inducida. 5ik5

En Venezuela, esta palpitación liberadora, encendida como una llamarada perpetua, como un volcán INSTITUYENTE, por el Comandante Chávez, ha demostrado ser mucho más que una simple coexistencia de individuos en un área determinada. En estas Entidades, los corazones que laten, se han convertido en una fuerza motriz, detrás de iniciativas que palpan en la cotidianidad los problemas y las necesidades reales y construyen soluciones ágiles y eficientes desde la raíz. Sin embargo, para que este impulso no solo florezca sino que permee, se consolide y se expanda para hacerse cuerpo y alma de la Nación-Estado que como innovación democrática estamos obligados edificar, se requiere poder entender de que estamos en un proceso ACELERADO de construcción, de un nuevo momento histórico para la Patria, donde el objetivo estratégico fundamental, es poder TRASCENDER por fases, a la institucionalidad de la vieja y decadente súper-estructura del Estado Nación, es decir, de lo que se trata, es poder construir una hegemonía multidimensional, que de cuenta de la civilización capitalista, del bloque histórico que sustenta el funcionamiento metabólico de la "esclavitud voluntaria" en la Sociedad estatal, en la Sociedad civil o privada y en las Sociedades oscuras, en sus distintas expresiones, sociedades estas, con las que en este momento, con prisa y sin pausa, la REVOLUCIÓN COMUNAL se esta querellando en el territorio.

Como sabemos, la esencia de la estrategia del proyecto Socio-Comunal, radica en la asociación y la organización, multiescalar y multidimensional de las Comunidades familiares en Entidades territoriales concurrente. Es decir, en la asociación de Comunidades familiares que cooperan e innovan para resolver problemas que a menudo escapan de la mirada opaca o miope de la burocracia estatal, como es la recuperación de espacios comunes hasta la creación de huertos urbanos, pasando por la organización de jornadas de salud o la implementación de sistemas de seguridad comunal, donde demuestran una gran capacidad de resiliencia y una comprensión profunda de las dinámicas locales que ningún ente externo puede igualar, generando desde la proximidad territorial, soluciones pertinentes y arraigadas en la realidad de quienes las viven a diario. Esta estrategia instrumentada a partir del desempeño de estas Entidades comunales, está diseñada para promover y producir como proceso y desde la base, los cambios jurídicos, políticos, económicos, culturales, sociales y ambientales, que han sido la razón de ser y existir de la revolución bolivariana.

Como es de esperarse, este valioso y entusiasta tejido socio-comunal a menudo se enfrenta a desafíos significativos. El esfuerzo de los burócratas por manipular su accionar, la desconfianza y el celo activo de la institucionalidad tradicional publica y privada con respecto a su desenvolvimiento, o la coptacion de los lideres y lideresas naturales por los profesionales de clientelismo, son manifestaciones que casi siempre frenan sus iniciativas, la mayoría de las veces cargadas de sabiduría colectiva y de un gran potencial realizador. En ese sentido, es crucial que los revolucionarios y las revolucionarias que hacen vida-laborar en las instituciones JERÁRQUICA de las Sociedad estatal, entiendan que el apoyo a las Entidades comunales, no es un acto de caridad, sino una inversión estratégica, que de manera audaz debe proporcionarse para acelerar el desarrollo de capacidades POLÍTICAS y de gestión, en los sujetos comunales que participan en la construcción de una nueva ciudadanía, la Ciudadanía comunal, a los que están involucrados en la edificación desde la comunalidad, de un nuevo sistema social activo, afectivo, efectivo y festivo que la proyecta. A estos revolucionarios y revolucionarias en el gobierno, el Presidente Nicolas les ha hecho un llamado, mas bien una advertencia disciplinaria, para que faciliten sin demora, el al Poder comunal de herramientas metodológicas y la capacitación científica-técnica , así como su reconocimiento como la fuerza protagonista de esta nueva historia, el Presidente Nicolas, considera que estas acciones son fundamentales para fortalecer y amplificar el esfuerzo que estos sujetos comunales hacen a diario, que se expresa en la suma exponencial de pequeñas victorias y en resultados de alto impacto que se miden en 58.000.000 invertidos y 5.800 proyectos en ejecución, trimestralmente.

Algunos podrían argumentar que las consultas comunales, para ejecutar proyectos de tan solo 10.000 $, están direccionada para promover la ejecución de iniciativas pequeñas y de alcance limitado. Sin embargo, es en la sumatoria de estas acciones comunales donde reside una fuerza poderosa y transformadora. Cada espacio de salud puesto en servicio, cada niño o niña jugando en una cancha deportiva recuperada , cada toma de agua potable en la casa donde no llegaba nunca, es decir, cada Comunidad familiar asociada a su Consejo Comunal, a su Comuna a una Ciudad comunal o circunstancialmente a un circuito electoral y, empoderada para participar en la toma de decisiones, representa un avance sustantivo y tangible del proceso de RENACIMIENTO de la SOCIEDAD COMUNAL de la CIVILIZACIÓN COMUNAL. Quien diciéndose "Chavista" Ignore o minimice la fuerza-potencial de la REVOLUCIÓN COMUNAL en esta nueva fase de la gesta o proeza bolivariana, esta desaprovechando una energía vital para la construcción del no retorno, prefigurado por el Comandante Chávez.

En definitiva, el despertar del espíritu de la comunalidad en Venezuela no es una utopía, sino la materialización palpable de un propósito revolucionario en desarrollo. Para que estos latidos se fortalezcan y se expandan, se requiere que se asuma sin mezquindad política alguna, que estamos en presencia de un cambio de paradigma, que se ha producido el advenimiento de una realidad política local que se enciende como proyecto nacional que se debe valorar, respaldar y acompañar sin sesgos grupales, ni cálculos electorales. Es hora de mirar e ir más allá de la consigna acartonada, de la narrativa oportunista, hay que reconocer que el PODER COMUNAL es una gran fuerza transformadora, que reside, como innovación democrática, en nuevos sujetos históricos, es decir, en los sujetos comunales, que ya han escogido y tienen su espacio/tiempo INSTITUYENTE para avanzar, dispuestos a la acción y la construcción colectiva de la DEMOCRACIA COMUNAL.

Komunero carlosoliveros 263 @gamail.com

Coordinador General Fundación Komunidad Humana para el Bien Komun (KOHUBIK)

Miembro del Consejo Rector de la Universidad Bolivariana de las Comunas